martes, 2 de abril de 2013

JUANITO


   Hoy se cumplen 21 años de la muerte de Juanito. Por el simple hecho de nacer en 1978, los recuerdos que mi memoria tiene de él jugando con el Madrid no son muy amplios, aunque la carpeta “Juanito” de mi disco duro, si que ha ido recopilando información a lo largo de los años, bien por reportajes, por crónicas o relatos que he ido escuchando a la gente.  Juan era un genio, uno de esos tipos que nunca pasan desapercibidos por la vida, un tipo de carácter fuerte pero también lleno de bondad, chuleta y orgulloso pero a la vez humilde; un tipo que moría por sus compañeros y por su Real Madrid, un tipo capaz de montarle a Valdano en el campo la de Dios es Cristo y de repente abrazarlo con desmesurado cariño en el túnel de vestuarios, un jugador capaz de encender a un estadio entero a base de actitud, coraje y cojones; es por todo eso y mucho más que Juanito es el único jugador de la historia al que se recuerda partido tras partido en un campo de fútbol ininterrumpidamente durante estos 21 años y los que seguirán.Porque en definitiva lo que Juanito representaba eran los valores del Madrid, sí sí, VALORES, esos de los que tanto se habla en los últimos tiempos, pues bien, ahí tienen los madridistas y no madridistas un icono de los valores verdaderos, que no son otros que la lucha, el carácter y el dejarte la piel por el escudo.
    Ya sé que muchos recordarán que le pisó la cabeza a Lothar Matthaus, sí, lo hizo, en un ataque de furia por vengar la brutal patada que del alemán recibió su compañero Chendo, y de lo que se arrepintió a los dos segundos, de ese acto provocado por su “yo malo” como él mismo dijo, nunca se sintió orgulloso, ni él ni el madridismo, pero Dios sabe que lo hizo por defender a un compañero, por defender con gallardía el escudo del Real Madrid al que tanto amaba.
   Juanito defendió el escudo del Madrid cuando el fútbol era fútbol, cuando se luchaba por cada balón como si te fuera la vida en ello, nada que ver con la gimnasia artística o el baile de salón que pretenden vendernos hoy en día; cuando se acongojaba al eterno rival en el túnel de vestuarios, no como ahora que todo son besitos, abrazos y arrumacos; cuando la prensa deportiva se limitaba a hacer crónicas de los partidos en vez de jugar a ser directivos, entrenadores y hasta pastores espirituales, en definitiva, cuando Noventa minuti en el Bernabéu eran molto longo. “Hay que subir el balón, que Juanito la prepara, que Juanito la prepara……….”