miércoles, 6 de abril de 2011

LA NOCHE MAS BLANCA

Habría que remontarse a tantos años atrás para recordar una noche tan feliz en lo futbolístico como la de ayer que ni siquiera soy capaz de conseguirlo. Y es que a las 20.45 de ayer, Raúl sincronizó su reloj con el Bernabeu para avisar al mundo entero de que ahora los latidos madridistas también suenan con fuerza fuera de Concha Espina. Cuando Raúl se marchó, un trocito de nuestros corazones se fue con el, y ahora se empeña en devolvernos el gesto diciéndonos que no nos preocupemos, porque de una u otra manera esta Champions va a ser mas blanca que nunca, porque si no la gana el Madrid, de alguna manera él la ganará para todos nosotros. Que grande eres Rulo, ayer superaste al gran Maldini y ya eres el jugador que mas partidos ha disputado en la que es “TU” competición, ayer marcaste otro gol mas para sumar a tu condición de máximo goleador de “TU” competición y ayer pusiste un pie y medio en semifinales en un escenario en el que nunca ganaste ni marcaste con “TU” Madrid. Tu y nosotros siempre caminaremos juntos Raúl, así que muchas gracias por lo de ayer, porque la noche no hubiera sido feliz del todo sin tu colaboración, de veras “7”, Muchas Gracias. Anoche vimos de nuevo ese Bernabeu palpitante, ese Bernabeu de las grandes noches europeas que lleva en volandas a los suyos camino del éxito, y es que cuando esta bendita afición percibe lo relevante que puede ser jugar de “12” es mas bendita que ninguna, y deja en evidencia las giliflautadas que sueltan ciertos individuos asegurando que el Santuario Blanco es como un frío teatro. Vestido de gala para la ocasión, invitó a un inocente Tottenham a pasar por caja, y tuvo la mala suerte de dar con “Manolito” de cajero que no les hizo el más mínimo descuento, poco después el gigantón Crouch protestó el elevado precio y las consecuencias las pagaron sus compañeros. Con razón decía el entrenador inglés, (que ahora no recuerdo como se escribe, pero que es reconocible por su cara “colorá”) que si a Mou le servía el 0-0 se iban para casa, y es que barruntaba la que se le venía encima, porque con sus sesenta y cuatro años ha visto al Madrid ganar cada una de sus NUEVE Copas de Europa, y sabe que cuando ese escudo asoma por Europa se jode el chollo. La eliminatoria está muy bien encarrilada, pero mal haríamos todos si pensamos ya en semifinales, quedan noventa minutos y hay que jugarlos, pero antes hay que jugar en San Mamés, hay que seguir martilleando en la Liga para ponerles las cosas difíciles a esos de ahí arriba, esto aún no ha acabado, por delante aún hay mucho que ganar o perder y como me dijo mi cuñado entre risas, después de impregnarse de euforia en el Bernabeu, ocho puntos hasta son pocos. HALA MADRID.