Desde que allá por el mes de Marzo el Madrid quedó eliminado en Champions, no he vuelto a prestar atención al “chileno”, el cual ya saben los que visitan este blog que no es santo de mi devoción, durante casi dos meses he intentado ignorarle, porque considero (al igual que durante toda la temporada) que su aportación es nula. Ayer, ante otro equipo “serio” volvieron a aparecer los fantasmas. El que se quiera engañar que se engañe, pero este tío no sirve para entrenar al Real Madrid, estoy seguro que con este equipo, el Juande de turno estaría líder de esta Liga y quién sabe si metido en la final de Champions. Las continuas insinuaciones de Valdano sobre su más que posible continuidad en el cargo son un insulto a la inteligencia de la afición madridista. ¡¡FUERA!!
Claro, que al hombre de moda, al que la prensa está intentando hacer aterrizar en Madrid, no lo quiero ver por aquí ni en pintura; traer a Mourinho aún sería un error mas grande que mantener al chileno, el portugués está bien donde está, en un club donde “solo” se exigen resultados sin importar el juego, donde los medios no importan si se consigue el fin. Nosotros ya hemos tenido a Capello dos veces, en su primera etapa se fue por voluntad propia para rescatar al Milán y en la segunda no se tuvo confianza en él a pesar de cumplir el objetivo, porque el perfil de sus equipos no gusta en Concha Espina, por tanto menos aún gustará el de Mourinho.
Entre tanto, esto se acaba, hoy quedan por disputarse tres puntos menos que ayer, y cada jornada que transcurre es un pequeño trecho para el Barça camino del título, a los de ahí arriba se les presagia poca gasolina en el tanque, están casi en la reserva y si llegarán o no al final es una incertidumbre, lo que está claro es que no pueden pararse a especular. El Madrid por su lado lleva combustible de sobra, pero su mecánica podría decir basta en cualquier momento, ayer frente a Osasuna estuvo a punto de saltar por los aires pero no lo hizo. Los blancos han aprendido a vivir en el alambre como pez en el agua, de hecho ayer ni siquiera estaban nerviosos cuando faltaban dos minutos para que terminara el partido, cuando los aficionados nos comíamos las uñas pensando que no siempre la remontada es posible, ellos seguían a lo suyo convencidos de que el balón acabaría por entrar, y entró, por enésima, o duodécima o cualesquiera …ima vez que quieran, volvieron a conseguirlo, parece como si jugaran a encabronar al rival, me imagino ayer a los culés conteniendo la respiración, esperando que pasaran apenas unos minutos para sentirse campeones, luego la decepción, la resignación de ver como se levantan cuando ya casi rozaban el suelo. Algunos lo llaman suerte, otros fé y otros vayan ustedes a saber, pero yo solo tengo claro que la leyenda es cierta, no es un mito, el espíritu de este club es indestructible, y ese será el que desenvaine la blanca espada para cercenar las ilusiones barcelonistas. Cibeles Prepárate.
Claro, que al hombre de moda, al que la prensa está intentando hacer aterrizar en Madrid, no lo quiero ver por aquí ni en pintura; traer a Mourinho aún sería un error mas grande que mantener al chileno, el portugués está bien donde está, en un club donde “solo” se exigen resultados sin importar el juego, donde los medios no importan si se consigue el fin. Nosotros ya hemos tenido a Capello dos veces, en su primera etapa se fue por voluntad propia para rescatar al Milán y en la segunda no se tuvo confianza en él a pesar de cumplir el objetivo, porque el perfil de sus equipos no gusta en Concha Espina, por tanto menos aún gustará el de Mourinho.
Entre tanto, esto se acaba, hoy quedan por disputarse tres puntos menos que ayer, y cada jornada que transcurre es un pequeño trecho para el Barça camino del título, a los de ahí arriba se les presagia poca gasolina en el tanque, están casi en la reserva y si llegarán o no al final es una incertidumbre, lo que está claro es que no pueden pararse a especular. El Madrid por su lado lleva combustible de sobra, pero su mecánica podría decir basta en cualquier momento, ayer frente a Osasuna estuvo a punto de saltar por los aires pero no lo hizo. Los blancos han aprendido a vivir en el alambre como pez en el agua, de hecho ayer ni siquiera estaban nerviosos cuando faltaban dos minutos para que terminara el partido, cuando los aficionados nos comíamos las uñas pensando que no siempre la remontada es posible, ellos seguían a lo suyo convencidos de que el balón acabaría por entrar, y entró, por enésima, o duodécima o cualesquiera …ima vez que quieran, volvieron a conseguirlo, parece como si jugaran a encabronar al rival, me imagino ayer a los culés conteniendo la respiración, esperando que pasaran apenas unos minutos para sentirse campeones, luego la decepción, la resignación de ver como se levantan cuando ya casi rozaban el suelo. Algunos lo llaman suerte, otros fé y otros vayan ustedes a saber, pero yo solo tengo claro que la leyenda es cierta, no es un mito, el espíritu de este club es indestructible, y ese será el que desenvaine la blanca espada para cercenar las ilusiones barcelonistas. Cibeles Prepárate.